jueves, 24 de diciembre de 2015

A veces es válido estar triste… aunque sea Navidad?

(No puedo dejar pasar la fecha… aunque he dejado de escribir por un tiempo…)

Pues sí, aunque es verdad que podemos controlar el 90% de lo que nos pasa al saber cómo reaccionar ante lo que nos sucede, aún somos humanos y eso es lo que nos hace que aunque queramos controlar lo que sentimos a veces nos embarguemos de esos mismos sentimientos apagados.

Se vale estar triste, apachurrado, afligido, apenado, adolorido… y se vale en cualquier época… 

Pero a pesar de todo, debemos tener fe. La fe debería ser como eso obligatorio para todos, y no me refiero a una fe religiosa, sino más bien, a una fe espiritual. Una fe que viene desde adentro y se manifiesta en el creer que todo saldrá bien, que todo lo que viene será mejor, que la vida es bonita con sus altos y bajos, y que basta con vivirla mientras se pueda de la mejor forma, junto a las personas que amas y que te aman.

Y debería estar ahí, en cualquier época... siempre, aunque a veces debilitada, debe estar ahí, presente!

Así que cualquiera que sea tu fe, espero que no desmaye! Que no se deje abatir! A veces es difícil… pero saca ánimos de donde no hayan, piensa en alguien que sabes que te necesita… todos tenemos alguien… un familiar, un amigo, un amigo de cuatro patas… y sobretodo ese alguien que más necesita que estés bien contigo mismo, pues TU MISMO!!!