¡Adoro ser rubia! Siempre
quise hacer este cambio, pero me detenía el hecho de tener que decolorar mi cabello
y saber que se va dañando con estos procesos químicos, además de la inversión continua
que hay que hacer para retocar las raíces.
Resulta que nuestro cabello
se compone de cutículas, que protegen y permiten el paso del agua en todo el
largo del cabello, el problema que acontece es cuando estas cutículas se
deshidratan por diversas causas externas o internas a la que exponemos al
cabello. El sol, el agua del mar, o el cloro de las piscinas, el smog, el aire
caliente de la secadora, el uso continuo de la plancha, incluso los cambios que
se hacen en la alimentación, las dietas, o usar ciertos medicamentos, son
algunos de los factores que tienden a hacer perder la belleza de nuestra
melena.
Desde que me lo pinté, hubo
un tiempo en que me obsesioné porque quede rubio dorado y continué pintándolo y
retocándolo sin darle los cuidados debidos con mascarillas o tratamientos para
que lo protejan de los tratamientos agresivos a los que lo estaba sometiendo
continuamente, vi mis puntas afectadas terriblemente, así que comencé a gastar
en tratamientos para tratar de que mejore, cosa que no ha salido nada barato,
pero los resultados no han sido tan notorios. Por lo que comencé a investigar
sobre tratamientos caseros que podemos hacer desde nuestro hogar sin tener que
gastar mucho. Y es que a veces nos olvidamos que en la naturaleza podemos
encontrar a un gran aliado.
Así que hice una
recopilación de mis tips para ayudar a nuestro cabello, espero los puedan poner
en práctica:
Sin más que decirles que: Pónganlos
en práctica. Les garantizo que van a notar mejoría y eso sí no dejen de
usarlos, cuando vean que el cabello comienza a mejorar, sigan aplicándolos y
luego pueden ir disminuyendo la frecuencia del tratamiento casero.